La amistad

Existen personas en nuestras vidas que nos hacen felices
por la simple casualidad de haberse cruzado en nuestro camino.
Algunas recorren el camino a nuestro lado, viendo muchas lunas pasar,
mas otras apenas vemos entre un paso y otro.
A todas las llamamos amigos y hay muchas clases de ellos.

Tal vez cada hoja de un árbol caracteriza uno de nuestros amigos.El destino nos presenta a amigos,
los cuales no sabíamos que irían a cruzarse en nuestro camino.
A muchos de ellos los denominamos amigos del alma, de corazón.
Son sinceros, son verdaderos.
Saben cuando no estamos bien, saben lo que nos hace feliz.

Y a veces uno de esos amigos del alma estalla en nuestro corazón
y entonces es llamado un amigo enamorado.
Ese da brillo a nuestros ojos, música a nuestros labios, saltos a nuestros pies.
Mas también hay de aquellos amigos por un tiempo,
tal vez unas vacaciones o unos días o unas horas.
Ellos acostumbran a colocar muchas sonrisas en nuestro rostro,
durante el tiempo que estamos cerca.

Hablando de cerca, no podemos olvidar a amigos distantes,
aquellos que están en la punta de las ramas
y que cuando el viento sopla siempre aparecen entre una hoja y otra.
El tiempo pasa, el verano se va, el otoño se aproxima y perdemos algunas de nuestras hojas,
algunas nacen en otro verano y otras permanecen por muchas estaciones.
Pero lo que nos deja más felices es que las que cayeron continúan cerca,
alimentando nuestra raíz con alegría.
Son recuerdos de momentos maravillosos de cuando se cruzaron en nuestro camino.
Simplemente porque cada persona que pasa en nuestra vida es única.
Siempre deja un poco de sí y se lleva un poco de nosotros.

Habrá los que se llevarán mucho,
pero no habrán de los que no nos dejarán nada.
Esta es la mayor responsabilidad de nuestra vida
y la prueba evidente de que no nos encontramos por casualidad.

Un minuto de silencio...

Un 18 de Noviembre...
Tres ambulancias llegan al Juan Carlos I.
El parque se llena de periodistas ansiosos por comunicar la noticia,
Mas de una quincena de adolescentes ven una tragedia
que nunca podran olvidar, una imagen que no se quitara de la cabeza en mucho tiempo.
Realmente nadie sabía lo sucedido, fue algo tan rápido que nadie puedo evitarlo,
los motivos y hecho reales no son conocidos, estan demasiado afectados para poder contar lo ocurrido.
Unas vias, una chica, 16 años, un tren, un segundo y se hizo el silencio...
Años que no se recuperaran, culpabilidad, dolor, tristeza...
Sentimientos que llegan a nuestra cabeza sin poder evitarlo,
Una madre que cuando llegue a casa verá que no está...
Unos compañeros con los que en clase no estará...

Sonriele a la vida

Decide ser feliz hoy, de disfrutar el día, aún cuando te parezca que no hay motivos, mira a tu alrededor o hacia adentro, siempre hay uno que te saque un sentimiento agradable, alegre, confortable... una mirada, un gesto, un detalle que pueden cambiar tu día o hacerte dar cuenta que hay cosas hermosas porque vivir y estar feliz.
No dejes que las preocupaciones opaquen tu día. No te detengas, ocupate en lo que depende de tí... Algunas veces la soledad es excelente compañera y en ella podemos darnos cuenta que realmente no estamos solos. En algún lugar siempre hay alguien que te quiere, sólo observa.
La vida es dificil, pero ella y el mundo siempre nos da motivos para ser felices, está en nosotros el saber descubrirlos y disfrutarlo... Está en nosotros sentirnos bien, no magnificar lo que nos inquieta, perdonarte y perdonar por todo lo que nos lastima para dar paso a todo aquello que nos motiva, nos da paz, amor y nos hace ser feliz

Lagrimas

Lágrimas... sólo gotas de agua salada, o son la representación de unos sentimientos, tales como dolor, pena, y en menor medida, alegría. Porque las lágrimas duelen. Llorar duele.

Una vez hicieron una pregunta que era, "¿Lloramos porque estamos tristes, o estamos tristes porque lloramos?". Y en verdad puede ser que las dos afirmaciones sean ciertas, cuantos habéis empezado a llorar por un motivo, y al tiempo de seguir llorando no sabéis muy bien porque lo hacéis, pero sí sabéis que estais tristes.

Al derramar una lágrima se está derramando mucho más que una simple gota de agua. Porque si fuésemos capaz de leer las lágrimas veríamos cuanto ha sufrido esa persona, y el motivo de que su alma llore, por tristeza, por desamparo, por desolación, por dolor...

Pero si no somos capaces de leer las lágrimás, para ayudar, ¿cómo nos ayudamos? ¿Secándolas? ¿Dejándolas caer? O, ¿evitando que salgan? La verdad que yo no considero ninguna de esas opciones la correcta para calmar el dolor, el dolor no se calma si no brotan lágrimas, al contrario esto es lo mejor que nos puede pasar.

Si no brotasen estas lágrimas tan dolorosas, el dolor seguiría estando dentro, reprimido, pero ahí estaría haciendonos daño desde dentro, y de esa forma nunca podríamos llegar a ser felices. Y si lloramos, pues quizás, sólo quizás, algún día podamos ser felices, o por lo menos tendríamos una felicidad mayor...

Sueños

Hace tiempo dije que nadie puede estar totalmente seguro de si no está viviendo un sueño, de si todo esto es realidad... Pero hay otro tipo de sueños, las ilusiones, las ilusiones al fin y al cabo es lo que nos mantiene con vida.

Una ilusión es algo por lo que merece la pena luchar, algo con lo que crecemos, que nos da afán de superación, y -como no- con ellos crecemos. Y los deseos, son ilusiones aún más difíciles de conseguir, pero no imposibles, mas si puede que se olviden, y entonces sólo serán recuerdos, recuerdos incompletos...

Las ilusiones y los deseos que no alcanzamos hacen que estemos más tristes de lo que estamos, y eso duele. Entonces si no soñamos, no sufrimos, pero tampoco podemos vivir sin sueños, alguien dijo una vez: "Una persona sin sueños es una persona en blanco y negro". ¡Que razón tiene!

Pero, al igual que todo nos ayudan o nos destruyen. Si se cumplen las ilusiones, nos ayudan, si no se cumplen, también hacemos que nos esforcemos más en otras situaciones. ¿Entonces cuando nos destruyen? Cuando se cumplen todos, o cuando no se cumple ninguno. Porque hace que nos desesperemos...

Si nunca se te cumple un sueño, al final acabarás perdiendo todas las ilusiones; y si se cumplen todos, al final acabaremos sin esforzarnos por nada, y cuando alguno no se cumpla, pues nos herirá mucho más de lo que jamás pudíeramos haber pensado que nos hiera un sueño.

Pero que ocurre con los sueños inalcanzbles esos que sabemos que nunca se cumplirán, y sin embargo, seguimos luchando por ellos, ¿Porqué? ¿Quien sabe? solo tenemos que seguir creyendo en ellos